Garabatos

Un ejemplo de paciencia para sobrellevar las dificultades fue Margarita Velandia Uchuvo que permaneció postrada en cama 14 años.
Pesaba 90 kilos cuando una mañana de marzo de 1998 la sorprendió una enfermedad que la tiró al suelo y la paralizó. En el Hospital del Carmen, en Bogotá, el médico le explicó que la retención de líquidos era la causa de su obesidad y de la trombosis que le sobrevino.
Su único hermano Manasés la llevó para su casa en Sesquilé. En su lecho se resignó a soportar los dolores en su cuerpo y los malestares de los calmantes. Solo podía valerse de su mano derecha para acomodarse, con un palo de escoba o un manubrio colgado del techo al que le adaptaron un interruptor para encender el radio y la luz.
Se refugió en la oración y al poco tiempo le llegó lo que para ella fue un regalo: la emisora comunitaria Angelus Stereo, con programas como el de la hermana Susana Rodríguez Peña “Un mensaje de optimismo”, hecho para los que sufren en el Señor; “Caminando con Jesús” que hacía el párroco Timoleón Castañeda, y por supuesto el Santo Rosario. También el televisión la acompañaba hasta que se le dañó.
Margarita fue el ejemplo para quienes se quejan por banalidades, pese a su estado recibía las visitas con rostro radiante, ojos vivos y una enorme sonrisa demostrando el gozo que sentía al ser visitada y ocultando el sufrimiento.
El pasado 24 de septiembre, cumplió 64 años.
De manera jocosa ella misma decía que esperaba que Dios encontrara la lista donde estaba su nombre para el llamado, que precisamente le hizo este 22 de marzo de 2012.