Garabatos

A Rubiela Vega no sólo le ha tocado demostrar que, como la primera mujer en ocupar la alcaldía, es capaz de hacer las cosas iguales y hasta mejor que sus antecesores, al tiempo en que desempeña su rol de esposa y madre sino que, como si fuera poco, la vida le pone una difícil prueba para la que nadie, nunca estará preparado… pero así como le ha puesto la cara y a luchado contra las mayores dificultades de su vida, con ese mismo optimismo está afrontando al maligno cáncer de seno. Una prueba en la que ella ha comprobado el afecto que muchos sesquileños le tienen y le han manifestado con gestos de solidaridad desde que se hizo publica el pasado mes de diciembre. Las insufribles quimioterapias no merman el ánimo que la caracteriza y que por el contrario continúa reflejando en su trato y en su trabajo que no ha querido descuidar. Este periódico, aunado al sentimiento de la gran mayoría, se solidariza con la señora Alcaldesa y le desea la pronta superación de su mal porque su familia y Sesquilé la necesitan. Que sea éste un llamado también a todas las mujeres a realizarse su autoexamen de seno cada tres meses y una mamografía cada año para evitar pasar por esa difícil situación.